Último día

Diciembre termina como todos los diciembres sin nadie que espere a que se termine. Por que nadie espera a diciembre todos quieren que se termine, nadie le va a echar de menos, a nadie le importa por que detrás de él no hay nadie más.

En el fondo todos terminamos pareciéndonos a diciembre, esperando y esperando hasta que al final es el último día cuando le damos importancia cuando miramos atrás y vemos que todo termina.

Diciembre termina como empieza frío y triste, con ese viento que traspasa las mil chaquetas que llevamos y se nos agrieta la piel dejandola seca y sin vida. Con esa lluvia siempre en el momento mas inoportuno, con ese beso tan frío. Diciembre es el fin de algo, algo bonito, algo triste, algo doloroso, algo alegre...

Pero diciembre solo es el hasta luego del comienzo de otro año

Romeo

La dependienta nos mira sonriendo. Tiene razón, parecemos otra estúpida pareja de enamorados que cada uno quiere pagar lo del otro. La chica sonríe devolviéndome el cambio mientras tu me metes los cinco euros en el monedero.

Salimos dándonos codazos y con mi sonrisa tonta. Tu mano apretuja la mía llevándonos a la tienda de al lado llena de perfumes que ni tu ni yo tenemos el suficiente dinero para comprar el bote más pequeño y barato. Entras sinvergüenza, como si tu solo pudieras comerte el mundo y en realidad solo comes el pan duro de ayer. Me empujas a acompañarte a llenarnos de aromas diferentes que acabamos mezclandose y oliendo peor que la colonia de mi abuena.

Te doy un tirón a la camisa para que nos vayamos de allí con mi cara de ángel, que bien conoces, y tu sonrisa caprichosa que tanto deseo.

-Serás miedica- me insinuas al oído
- Serás...

... mi Romeo

Algo en alguien

Por mucho que mientas yo se que no me echas de menos, no echas de menos mis palabras, ni mis risas. No te mientas, no me mientas. No me digas que me quieres si en realidad solo me querías antes cuando era... cuando era alguien. Cuando salían de mis sonrisas sin esfuerzo y mis lágrimas andaban en peligro de extinción.

No soy quien era, nadie sabe ni que paso ni como fue para que algo me convirtiera en alguien.

Por favor, no vuelvas a recordar, hazlo por ti.

Chucherías

Caminan juntos, sin cogerse de la mano, ella con un aire un poco infantil con algunos pasos dando leves saltos, el con pasos muchos mas duros pero igual de inocentes.

-¿A donde me llevas?- pregunta ella con su sonrisa abierta que deja enseñar todos sus dientes blancos
-A la tienda de chucherías
-Te empeñas en que continué siendo una niña- le refunfuña con una mueca de fastidio
-Y que tiene de malo eso? Me gustas cuando te comportas como una niña, cuando pones caritas cuando no sabes que hacer
-Pero un día creceré y empezare a odiar los días que llueve, me cabreare por cualquier tontería y querré ser una chica formal. Seré como todo el mundo- intenta crecer mucho mas de lo que es...
-Tu nunca serás como todo el mundo, no dejarás que el mundo te contagie de su seriedad y sus caras largas, tu nunca dejarás de ser quien eres
-Y si un día me olvido- quiere crecer un poquito más
-Te llevare a una tienda de chucherías sonríe satisfecho
-Odio cuando quieres tener la razón-... pero no lo consigue
-Me gusta cuando me la das

- ¿Y después?
- Después nada
- ¿Nada de nada?
- Nada en que algo exista

Marchita

Miras la ventana una y otra vez, yo me acerco para intentar ver lo que tu ves, pero no veo nada interesante. Miras mi silencio y te levantas cogiendo esa maceta ya llena de telarañas y de cuatro hojas secas que todavía perduran.

"Creo que esa planta esta muerta"- una suposición tuya nada más. Parece que hoy te a dado por encontrarle pegas a todo y verlo todo muerto.

"Que te he dicho que no! no! y no! No esta muerta, lleva dos años marchita dos años sin hojas, pero no esta muerta, ella nunca muere, por que soporta todas las tempestades, soporta los meses que no hay agua y soporta el duro sol del agosto. Pero nunca muere, solo esta marchita."- no te lo digo, no te lo explico, te lo grito como si tu tuvieras la culpa de que ya no florezca de que ya no le salgan flores verdes ni haga medias sonrisas como hacía antes, ni siquiera se pone perfume.

Suspiras. Vuelves a dejar la maceta en su sitio. Puede que la que esté viendo muertos por todas partes sea yo, tu solo me recuerdas de que estoy viva.

Demasiado

Siempre has sido demasiado. Te han dicho que esto era demasiado, que era demasiado para ti, que tu eras demasiado.
El mundo es demasiado, cuentas historias demasiado, lees libros demasiado, piensas demasiado, lloras demasiado.

¿Pero demasiado que?

Demasiado Yo

Olvido

A veces me olvido de que te estoy mirando hasta que levantas los ojos sin saber muy bien que cara poner. Pero no me olvido de tu nombre, ni de tu sonrisa estúpida ni la que pones cuando algo te da vergüenza, esa es la que menos se me olvida por que es la de la única forma que puedo ver el niño que llevamos dentro y no el niño que nos pintamos de vez en cuando.

Me gustaría poder guardar tu aroma en un bote o mejor, me gustaría que tu aroma siempre quedara pegado en mi piel que el mio dejara de existir para que solo existiera el tuyo en cada poro de mi piel, para que ella tampoco te olvide.

Recuerda que yo no soy nada quizá un olvido, solo soy una parte tuya que se pierde por las calles y que ahora le a dado por reír, recuerda que solo camino por donde tu pasas por que es de la única forma de que las huellas estén clavadas en el suelo.

- Creo que lo mejor será hacerme una foto para no olvidarme
- Lo mejor sera que no olvides que te olvidas...
- Ni te olvides de quien eres

Lo siento, Se me olvido decirte el otro dia que te quería
tranquilo seguire queriendote hasta el dia en que no me olvide

Egoista sentimental

Nunca creyó que llegara a aquel punto. Después de ser feliz y ver que las cosas le van bien no soporta que alguien la abandone llenándose a las manos de otros y riendo con los otros, algún tipo de ira nace dentro de ella haciendo sentirse mas avergonzada de ella misma por que no es la primera vez.
Es una maldita egoísta que quiere que le den cariño para luego salir corriendo con el pretexto de que necesita su espacio aún sabiendo que las únicas personas que son su espacio.
Quiere ver el sol, la luna y las estrellas en el mismo momento, se siente una cría por segunda vez a día de hoy.

Pero lo único que es, es una egoísta sentimental no quiere castillos ni riquezas solo quiere que le den cariño aunque tenga que quitarle la felicidad a todo el mundo.

Agacha la cabeza maldiciendo que no lo va a volver a hacer, pero sabe que en cuanto la vuelva a abrazar sentira ese mismo pinchazo en el corazon pero no serán celos por que si lo fueran tendría un buen pretexto para volver a amarle

Yo y ella

Déjame interpretar mi papel de chica mala por unos minutos mas. Estoy harta que siempre me des el de chica buena yo también tengo derecho a ser mala y a saltarme normas de vez en cuando. Soy alguien mas que la muñequita buena que obedece ordenes y se sienta a primera fila. Necesito que veas que puedo ser mala y buena a la vez. Puedo ser yo y ella.

Déjame intentarlo y lo conseguiré aunque me vaya la vida en ello, y estate tranquilo que no lo haré por él, si no por mi.

Se que no confías en mi, ni en mi autocontrol pero estoy segura de que puedo serlo, por que puedo ir un día con coletas y un lazo rosa y al día siguiente con tacones y solo cinturón.

Demasiado buena para ser mala? No, demasiado segura para jugar con la inseguridad.

Tiraré piedras por la mañana y jugare a muñecas a escondida

- Ayer me pareciste mas sensible que hoy
- Es que dimití como actriz

Paul Géraldy

1885-1983. Seudónimo de Paul Lefèvre, poeta y dramaturgo francés. Autor de un estilo intimista y sentimental.

El más difícil no es el primer beso sino el último.

El más bello instante del amor, el único que verdaderamente nos embriaga, es este preludio: el beso.

Si tú me amaras y yo te amase, ¡cómo nos amaríamos!.

El beso es la válvula de escape de la honestidad.

Seducimos valiéndonos de mentiras y pretendemos ser amados por nosotros mismos.

Llegará un día que nuestros recuerdos serán nuestra riqueza.

En el amor no hay crímenes ni delitos, sólo falta de buen gusto.

Diciembre

Diciembre empieza con sueño, descongelando los cubitos de mi piel y haciéndolos estremecer con el contacto.

Poco a poco empiezan a dibujarse sonrisas enormes, me he dado cuenta donde se meten las mariposas en invierno tócame y te lo enseñaré.
Háblame de tonterías como siempre y sonríe de vez en cuando, encontré el color de tus ojos, pensé que eran mas oscuros y resultan que son de color miel dulce o eran de coca-cola y que mas da!, lo único que me acuerdo es que todavía sigo metida en ellos. Como la vez que me contaste que la vida era un sueño.
Corro por las calles mientras llueve y el sol brilla con mas fuerza, parece que el tiempo este de mi parte y quizá alguna parte dentro de ti también lo este.

¿Recuerdas? Fuiste el único que tatuaste tu nombre de la forma mas literal en mi piel y por eso es que todavía no te he podido borrar de allí.

Amé, Amo y Amaré diciembre...

Escribo tu nombre en el borde del papel